Satis cognitum
El pontificado de León XIII supuso un cierto cambio en el modo en que los papas ejercían su magisterio.León XIII, mediante la carta apostólica Apostolicae curaem del 13.IX.1986, declaró solemnemente dicha nulidad[6].La encíclica Satis cognitum, publicada unos meses antes, fue interpretada en el Reino Unido como una preparación del terreno para esa declaración.Se manifiesta así el propósito de la encíclica, mostrar el deseo del papa por la unidad y su interés por el ecumenismo católico.[2] En la segunda parte del texto, el papa defiende enérgicamente la primacía del romano pontífice tal como se enseñó en el Concilio Vaticano I, como un corolario de la unidad de la Iglesia, pero señala Además, recuerda el papa que, del hecho de que el poder del romano pontífice sea pleno y soberanos, no se deduce que no haya otros poderes en la iglesia, pues al igual que la autoridad de Pedro es perpetua en el sumo pontífice La encíclica concluye con una llamada a la unidad con el papa, y por tanto con una invitación a los cristianos no católicos para que se reintegran en la Iglesia católica.