Rumpler Tropfenwagen

Se trataba del primer coche de producción con línea aerodinámica, precediendo a los Chrysler Airflow y Tatra T77.

[5]​ Para permitir la forma aerodinámica, el Tropfenwagen recurrió por primera vez al uso de cristales curvos -en un solo plano- en un vehículo de serie, con el parabrisas y las ventanas laterales significativamente curvadas.

[1] Como resorte se emplearon ballestas longitudinales en voladizo, mientras que el tren delantero utilizaba un eje rígido convencional suspendido de un ballestón transversal.

Con capacidad para hasta cinco pasajeros, todos iban sentados entre los ejes, obteniendo así la máxima comodidad, mientras que el conductor iba delante para maximizar la visibilidad.

Sus soluciones técnicas, en particular la suspensión trasera que hacía posible fijar sólidamente el diferencial al chasis fue empleada por Mercedes-Benz durante más de 30 años y se sigue utilizando a día de hoy en los vehículos pesados Tatra.

Por otra parte la disposición de su mecánica central trasera se utiliza muchos vehículos deportivos actuales e inspiró sin duda al Mercedes 150H (W30) y a los microcoches Standard superior y Maikäfer de Josef Ganz.

Rumpler-Tropfenwagen 4A106 Vista lateral
Vista posterior; Rumpler Tropfenwagen conservado en el Deutsches Museum de Munich