Roland Freisler
Fue combatiente durante la Primera Guerra Mundial en la que logró el rango de teniente en 1915.Koch dijo que «Freisler nunca fue comunista, aunque a principios de su carrera (...) sí pertenecía al ala izquierda del NSDAP».Pese a su indiscutible eficacia legal, rapidez mental y oratoria fervorosa, no se le permitía acceder al cargo de ministro.Según Uwe Wesel, la élite nazi lo veía comprometido con las ofensas de su hermano Oswald Freisler en contra del partido; además, su presunto pasado bolchevique lo hacía altamente sospechoso a los ojos de Hitler y oficiales.Desde la calle Prinz Albrechtstrasse hasta la estación de trenes Anhalter Bahnhof estaban todos los edificios en llamas.El juez Harry Haffner (1900-1969), que sucedió a Freisler en la causa, absolvió por falta de pruebas a Fabian von Schlabrendorff, quien años más tarde se convertiría en miembro del Tribunal Constitucional Federal Alemán de la RFA.Según un corresponsal extranjero, «nadie lamentó su muerte»,[14] y según Luise Jodl, la viuda del general Alfred Jodl, cuando su cadáver fue llevado al hospital de Luetzow alguien exclamó: «Es el veredicto de Dios».Después de la guerra, su viuda, Marion Russegger (1910-1997), cobró la pensión estatal por viudedad hasta 1952.En Múnich, algunos de sus condenados son hoy recordados: Al menos cinco veces ha sido interpretado en la pantalla: En la novela de Hans Fallada Solo en Berlín (Jeder stirbt für sich allein), es mencionado como Juez Feilser.