Quizás el logro más recordado de sus exploraciones fue su remontada y, luego nombramiento, del río Columbia, en 1792, mientras realizaba su segundo viaje.
Se dice, pero no está documentado, que sirvió en la Armada Continental durante la Guerra Revolucionaria Americana.
[6] Bulfinch y otros financiadores querían comerciar con las pieles marinas capturadas en la costa noroeste de América del Norte y llevarlas directamente a China, ya que Bulfinch había leído que el capitán James Cook había hecho lo mismo con éxito.
Pronto llegaron también varios buques mercantes británicos y el conflicto entre el español y los británicos dio lugar a la crisis de Nootka, que casi ocasionó la guerra entre ambas naciones.
Martínez se apoderó de varios buques, incluido el Princess Royal.
[12] Gray asistió luego a una recepción ofrecida en su honor por el gobernador John Hancock.
Esa compra se produjo cuando Gray había terminado su viaje y emprendido el regreso.
En mayo ordenó un ataque contra un pueblo Nuu-Chah-nulth chicklisaht en el Esperanza Inlet o en el Nasparti Inlet, en norte del Nootka Sound, matando a siete personas e incautándose las pieles de nutria marina nativas.
[16] Más tarde, en 1792, en Grays Harbor, Gray disparó contra un grupo de chinook, matando a veinte.
[16] Durante su viaje de 1792 a bordo del Columbia Rediviva Gray notó que unas aguas fangosas fluían desde la costa y decidió investigar por si podría haber encontrado el "Gran Río del Oeste."
[13] Los dos capitanes se reunieron e intercambiaron información sobre la geografía de la costa: Gray habló a Vancouver del gran río en el que se había intentado adentrar en 1788, pero Vancouver dudaba de que hubiera un gran río en esa latitud.
Ingraham contestó largamente a la carta de Bodega y escribió: «ya que él sabía todas las circunstancias, el capitán Gray desea que yo le conteste y él firmará de manera conjunta» ("as I knew every circumstance, Captain Gray desired I would answer and he would sign it jointly.
")[26] Según la carta firmada por Ingraham y Gray, Meares había hecho muchas declaraciones falsas sobre los acontecimientos de 1789.
Por otra parte, Ingraham escribió que Meares no compró ningún terreno al jefe Maquinna, como mantenía.
En cuanto al tratamiento a los estadounidenses por Don Esteban, hemos siempre declarado sobre ello en los términos como la debida hospitalidad, y estamos otra vez felices de poder hacerlo, lo que consideramos de justicia con su conducta.» ("We sincerely hope, sir, when things are represented with truth, it will rescue our friend Don Estevan J. Martínez from censure.
[26] A Bodega le satisfizo el relato de Ingraham y Gray.
Una vez que llegó Vancouver, Bodega utilizó el informe, junto con otras tácticas, para forzar a Vancouver a un callejón sin salida diplomático una vez que las negociaciones habían comenzado.
Si no fuera por la carta de Gray e Ingraham, junto con la llegada tardía de Vancouver, y varios otros factores, es probable que Bodega hubiera devuelto el asentamiento a los británicos.
En cambio, Bodega le ofreció sólo la vuelta de la pequeña cala donde Meares había construido su choza en 1789.
Además, Bodega hizo que calafates, herreros y carpinteros españoles repararan la Columbia.
Bodega también le proporcionó alimentos frescos, como verduras y pan caliente, todos los días.
Ingraham escribió en su diario: «Considerando la parte del mundo en que estamos, me pareció un presente muy hermoso.
No paso un día durante nuestra estancia en ese puerto, sin que todos los buques —sin respeto a la persona o la nación— recibieran muestras de la hospitalidad de Don Juan» ("Considering the part of the world we were in, I thought this a very handsome present.
Not a day passed during our stay in this port, but every ship—without respect to nation or person—received marks of Don Juan's hospitality.
[4] Más adelante en su carrera, Gray participó en la Cuasi-Guerra franco-estadounidense de 1798-1800, un conflicto no declarado y puramente marítimo relacionado con las Guerras Napoleónicas.
Allí, el Alert y su carga fueron vendidos como premios del buque francés.
[28] También hizo viajes posteriores a Inglaterra y al sur de los Estados Unidos.
[2] Dejó esposa y cuatro hijas, que solicitaron al Congreso de los EE. UU.
En esa época los descubrimientos de Gray no le reportaron renombre ni se creían importante.
La demanda rival británica llamó a la porción más austral de esa zona en disputa el Distrito de Columbia, que deriva del nombre elegido por Gray para bautizar el río.