La calle sansense cambió el nombre por Brasil en 1922, coincidiendo con el centenario de la independencia del país sudamericano.
Este tramo corresponde al que actualmente delimitan las calles Miguel Ángel y Melchor de Palau.
El proyecto ganador, diseñado por Léon Jaussely, dibujaba una Gran Vía de Ronda, cuyo trazado incorporaba la ya existente calle Brasil.
[4] Sin embargo, debido al elevado coste de las obras y las expropiaciones, su realización quedó aparcada varios años.
Los vecinos afectados se movilizaron exigiendo mayores indemnizaciones y la cobertura del cinturón, petición esta última que solo fue atendida en la calle Badal.
[11] Sin embargo, la antigua casa consistorial del Sants independiente, ubicada en la misma plaza, fue derribada.
Este tramo incluía la calle Brasil, donde la vía, por presión vecinal, pasaba deprimida a modo de trinchera, construyéndose un puente para vehículos y peatones en la calle Miguel Ángel.
[12] Tres años después, en 1975, las asociaciones vecinales obtuvieron una victoria simbólica en los juzgados, cuando el Tribunal Supremo anuló el acuerdo municipal de construcción del I Cinturón.
La alta contaminación ambiental y acústica del Cinturón, así como la cicatriz provocada en la trama urbana del barrio de Sants, mantuvieron activas durante años las luchas vecinales por la cobertura.