Rúskaya stariná (en ruso: Ру́сская старинá) fue una publicación mensual de historia, fundada en San Petersburgo, Imperio ruso en 1870 por Mijaíl Semevski (aunque hasta 1877 no pudo publicarse con su nombre y aparecía su hermano Vasili Semevski).
Una gran variedad de los materiales impresos dio a la revista un amplio auditorio.
A pesar de su difusión, no producía ingresos, puesto que el editor se preocupaba constantemente de adquirir nuevos materiales, reponer el archivo y mejorar la revista.
Su esfera de intereses principal fue la historia rusa del siglo XVIII.
Al hacerse redactor jefe de Rúskaya stariná, su actividad literaria se centró en esta publicación.
A veces se hacían los cortes en las publicaciones según las consideraciones de la censura.
En el periodo tras la revolución muchos libros antiguos fueron destruidos, y en las bibliotecas rusas no se había conservado ni una colección completa de la revista.
Entre los materiales que aparecieron en Rúskaya stariná, tienen especial importancia: Una gran contribución a la revista fueron las Notas y el Diario de Aleksandr Nikitenko (1888-1892) y también las Notas de Nikolái Pigorov (1884-1885, 1887).
En las páginas de Rúskaya stariná se publicaron los pensamientos, misivas, el epigrama de Kondrati Ryléyev, la fábula de Iván Krylov, Iván Jemnítser, Aleksandr Yefímovich Izmáilov, la poesía del conde Alekséi Konstantínovich Tolstói, Yákov Kniazhnín, Aki Najímov, Konstantín Bátiushkov, el barón Antón Delvig, Mijaíl Rosenheim, Vasili Zhukovski, Mijaíl Yúrievich Lérmontov, Aleksandr Odóyevski, Wilhelm Küchelbeker y Yevgueni Baratynski, las estrofas redescubiertas de Eugenio Oneguin y Almas muertas.
La serie completa de la revista fue reeditada por primera vez en 2008 en San Petersburgo por la editorial "Alfaret".
La reedición se hizo con una encuadernación compuesta de vinilo con estampado en oro.