Iván Krylov

[1]​ Pequeño empleado de la burocracia imperial, se dio a conocer como escritor satírico y social en San Petersburgo con obras como El correo de los espíritus (1789), El espectador (1792) y El mercurio de San Petersburgo.

Tras haber empezado una carrera dramática con diversos dramas y comedias satíricas como El negocio de moda (1806) y Lecciones a las hijas (1807), publicó en 1809 una primera colección de 23 fábulas que tuvieron un enorme éxito.

A este volumen siguieron otros ocho entre 1810 y 1820 del mismo género que le valieron al autor una inmensa popularidad en su país y ser tenido en la actualidad como el fabulista por excelencia de la literatura rusa.

En Moscú, el estanque del Patriarca está adornado con estatuas referentes a sus fábulas.

[1]​ Las fábulas de Krylov se inspiran a menudo en las de Esopo y La Fontaine y revelan un pensamiento pequeñoburgués lleno de sentido común y un cierto filisteísmo ético.

Monumento en homenaje a Iván Krylov en el Jardín de Verano (1854-55) por Peter Klodt von Urgensburg .