A su vez, es uno de los cuarenta y ocho barrios oficiales en los que se subdivide la capital argentina.
El barrio de Puerto Madero está comprendido por las calles Brasil, Av.
Para las exportaciones, pequeños barcos eran cargados en las riberas del Riachuelo, y desde allí se transportaba la carga (cueros y carne salada) a los buques más grandes anclados en el Río de la Plata.
Las embarcaciones, al no poder acercarse demasiado a la costa, debían permanecer ancladas en los llamados "pozos" del río (con profundidad suficiente), que funcionaban como un puerto natural.
Hacia 1820 un viajero inglés que arribó a Buenos Aires escribía: "El Río de la Plata podría ser bautizado con justicia como "infierno del navegante" (...).
Levantar muelles y dársenas no es tarea fácil en un país desprovisto de obreros".
[2] En 1882 el gobierno nacional del Presidente Julio Roca contrató al comerciante Eduardo Madero (sobrino del vicepresidente Francisco Madero) para que se encargara de la construcción de un nuevo puerto que solucionara estos inconvenientes.
Para la ejecución se contaría con el apoyo financiero británico a través de la Baring Brothers.
Cuando se estableció por ley la ciudad de Buenos Aires como capital del país, se optó por el proyecto de Madero, que fue definitivamente aprobado por el Congreso nacional en 1884.
A partir de ese momento pasaron a un segundo plano las obras de la Boca del Riachuelo —que se venían efectuando desde años atrás— y se decidió destinar los recursos necesarios para la construcción del nuevo puerto.
Ya ocupado todo el lado oeste de los cuatro diques, hacia 1900 comenzaron a construirse más depósitos sobre la isla artificial.
Eduardo Madero había planeado originalmente —junto a la casa financiera Baring Brothers—, la división de los terrenos en una cuadrícula regular de calles, organizando un negocio inmobiliario que según argumentaba, hubiera permitido el financiamiento del puerto, pero fue obstaculizado por el Gobierno Nacional y no se concretó.
Hubo muchas propuestas para reactivarlo o transformarlo para nuevas funciones (en 1925, 1940, 1960, 1969, 1971, 1981 y 1985), pero ninguna llegó a realizarse.
En 1929 el arquitecto francés Le Corbusier se imaginó una gran plataforma sobre pilotes donde construir rascacielos de oficinas.
Aunque por el momento está poco poblado, la superficie construida ha superado todas las previsiones iniciales.
En los pisos superiores de los docks, se instalaron oficinas y departamentos tipo lofts.
Instalando el casino sobre dos barcos anclados, la Lotería Nacional logró sortear la jurisdicción directamente al Estado Nacional, y pudo inaugurarse el emprendimiento, no sin conflictos legales que duraron por lo menos 5 años.
Si bien durante la recesión que enfrentó Argentina entre 1998 y 2002 fueron suspendidas muchas obras de gran envergadura planeadas para el barrio, la recuperación que experimentó la economía del país desde el final de la crisis le ha dado un nuevo impulso.
[9] Actualmente se encuentra finalizando la construcción de la Harbour Tower, la segunda torre más alta del país con 192 metros de altura y 52 pisos que se finalizará en 2024.
Los precios que han alcanzado estos emprendimientos son muy altos, consolidando a Puerto Madero como el barrio más caro de la ciudad.
También se han construido varios hoteles, nuevas tiendas y grandes áreas verdes.
También puede visitarse la elegante Fragata Presidente Sarmiento, amarrada en el Dique 3, primer buque escuela de la Argentina utilizado actualmente como museo.
La Reserva Ecológica no se encuentra dentro de la jurisdicción del barrio, sino en un espacio ganado al río.
[10] El sábado 25 de agosto se realizó la inauguración oficial del Parque Mujeres Argentinas y en julio de 2007 se inauguró el denominado Tranvía del Este (hoy desactivado).
Así, los terrenos que Eduardo Madero quería originalmente lotear y vender a privados para financiar el puerto, quedaron transformados en espacios verdes y públicos que fueron conocidos como el “balneario de los pobres”.
[16] Se trató del primero de este tipo en Buenos Aires, y se realizó un gran acto público con presencia popular, que fue brevemente amenazado por un chaparrón que resultó fugaz.
Más tarde, con los rellenos costeros que luego darían lugar a la Reserva Ecológica, el viejo balneario quedó definitivamente inutilizable.
[17] Hoy en día, sobre su arbolada vereda, se suceden una serie de históricos carritos que venden comidas al paso.
En 1965 Boca Juniors consiguió el permiso para iniciar un nuevo relleno costero para instalar en Puerto Madero su nuevo complejo deportivo, el cual iba a incluir un estadio para 150 000 personas que debía inaugurarse diez años después.
En febrero de 2016 dicho evento volvió a la Argentina, donde ganó el inglés Sam Bird.