Poemas arabigoandaluces
[1] Emilio García Gómez realizó un viaje en 1928 a Egipto y Siria, pensionado por la Junta para la Ampliación de Estudios.[4][5] La edición constaba de veinticinco ejemplares en gran formato, papel verjurado castillo, numerados del 1 al 25, y novecientos setenta y cinco ejemplares en octavo, papel marquilla, numerados del 26 al 1000.[5] Entre los autores de los poemas se encuentran reyes, visires, príncipes, califas y gobernantes de todo tipo; doctores, el mismo Ibn Said y otros conocidos simplemente como poetas o eruditos.[7] Emilio García Gómez se enmarca con esta obra en la Generación del 27.Miguel Asín Palacios decía que, además de su valor documental o histórico, sus traducciones están «re-creadas poéticamente y viven con propia vida estética y literaria.