El "persona" es la denominación que recibe el pastor de los rebaños de ovejas merinas trashumantes que ocupa una categoría inferior al ayudador, pero superior al zagal.
En los viajes por las vías pecuarias arreaba al rebaño habitualmente desde los laterales, procurando que las ovejas no se saliesen de la cañada y evitando que se metiesen en las fincas.
En el verano, en los puertos de montaña, se relevaba a turnos con el compañero, ayudados habitualmente por un motril, para el cuidado del retazo –porción menor del rebaño cuando se divide, formado unas 500 ovejas–.
Además, como a los otros pastores, se le permitía tener un cierto número de animales de su propiedad, llamado escusa, en el rebaño general del dueño y sin pagar por ello.
Habitualmente los ingresos por la escusa eran superiores a los del salario en metálico.