Anteriormente la colina estaba formada por un glacial que erosionó la parte más débil de la colina dejando actualmente destacada la parte rocosa respecto del demás terreno.
En las zonas más bajas de las peñas nos encontraremos con paisajes de encinas y robles; a medida que ascendamos iremos observando como van desapareciendo los árboles y aparecen los arbustos como el hinojo, el tomillo, el romero, la ortiga, la menta y el espliego.
También podemos ver algunas plantas características de esta zona del Moncayo como son la clemátide, llamada en Aragón petiquera (Clematis vitalba), la menta de hojas largas (Mentha longifolia), la orquídea rosa (Dactylorhiza elata), el guillomo (Amelanchier ovalis) y el tulipán silvestre (Tulipa sylvestris).
El sendero nos lleva hasta un collado entre dos de las Peñas de Herrera,desde donde es muy fácil subir a la más baja y disfrutar del espectacular paisaje.
Se suele ascender en la época que comprende de abril a agosto.