Paul Hoecker

Nació en el seno de una familia acomodada, en una mansión del condado de Glatz (en polaco, Kłodzko, una región que culturalmente pertenecía tradicionalmente a Bohemia y administrativamente a Silesia).

De regreso a Múnich, hizo gran amistad con los pintores Fritz von Uhde, Bruno Piglhein y Max Liebermann.

Tenía treinta y seis años (edad que se consideraba muy joven para un cargo de tal prestigio).

[3]​ Durante sus vacaciones estivales, salió a pintar paisajes del natural, a pueblos como Haimhausen, Utting am Ammersee, Breitbrunn am Chiemsee, donde trabajó duramente, sin regatear esfuerzos, y con gran entusiasmo.

Para la difusión del Modernismo fue, igualmente, muy importante su colaboración con la revista literaria y artística Jugend (Juventud), fundada en Múnich por Georg Hirth en 1896, en la que publicó numerosas ilustraciones Hoecker.

Su docencia terminará en 1897 debido a un gran escándalo en el que se vio implicado.

Una pintura suya de la Virgen María fue considerada irreverente y se rumoreó que había tomado como modelo para la imagen a un prostituto con el que mantenía relaciones sexuales.

[9]​ Hoecker se instaló en Italia, donde entró en contacto con el barón D'Adelswärd-Fersen, quien también había tenido que abandonar su París natal por un escándalo sexual.

Años después, ya atemperado el escándalo que le obligó a abandonar su país, Hoecker regresó a Alemania y se instaló en el campo, en su casa natal.

Nino Cesarini retratado por Paul Hoecker (1908).
Hoecker en su taller de Oberlangenau (1900).
La casa de Hoeker en Oberlangenau (1900).