La conflictiva sucesión presidencial de 1897 evidenció los problemas a interior del Partido Autonomista Nacional.
Durante los últimos seis años Carlos Pellegrini había ampliado su base de poder y sus seguidores lo propusieron como candidato presidencial.
La formación de dos nuevas líneas dentro del partido permitiría absorber, según Pellegrini, tanto a radicales como cívicos nacionales.
A pesar de las defensas realizadas por el oficialismo, el proyecto despertó el malestar en la sociedad, proclamándose en contra.
Desde aquel día, Pellegrini dirigió sus demandas a la promulgación de una ley que garantizara la libertad electoral.
Allí Pellegrini anunciaba las razones del nuevo movimiento político antiroquista en un discurso que atacaba la figura del presidente Roca: El Partido Autonomista estaba liderado por Carlos Pellegrini y contaba entre sus filas a dirigentes de la talla de Roque Sáenz Peña, Miguel Cané, Vicente Casares, Ezequiel Ramos Mexía, José María Ramos Mejía, Juan Balestra, Lucas Ayarragaray, Eliseo Cantón, Federico Pinedo, Manuel Carlés, entre otros.
En 1906, con vistas a las elecciones legislativas del 11 de marzo, Pellegrini organiza un frente electoral en la Capital Federal entre los autonomistas, los republicanos, los radicales bernardistas, aquellos que respondían a Bernardo de Irigoyen, y los amigos políticos del senador Benito Villanueva que se llamó "Coalición Popular".
Al día siguiente de las elecciones, fallecía el presidente Manuel Quintana y asumía como presidente José Figueroa Alcorta quien decidió integrar su nuevo gabinete con hombres cercanos a la Coalición Popular como Ezequiel Ramos Mexía y Norberto Piñero.