Originalmente estrenada como Octubre en la Unión Soviética, la película fue re-editada y lanzada en otros países como Diez días que transformaron el mundo, nombrado después del libro de John Reed sobre la revolución.
La población, no conformada con la situación social, realiza más manifestaciones exigiendo cambios.
Esta escena es dramatizada y merece un destaque por su representación: en un montaje fantástico, los puentes se levantan con los cuerpos de los bolcheviques extendidos sobre la plataforma mientras los burgueses tiran copias de los periódicos bolcheviques en el río.
[6] En octubre, Lenin desobedece al gobierno y comanda el ataque al Palacio de Invierno, en la que el gobierno tendrá un intento fallido de proteger el palacio colocando a varios militares a su favor.
[4][7] La película no fue tan exitosa o influyente en la Unión Soviética como lo fue El acorazado Potemkin.