La huelga (título original en ruso: Стачка, Stachka) es una película muda de 1924 dirigida por el cineasta soviético Serguéi M. Eisenstein.
La película describe una huelga ocurrida en 1903 por los trabajadores de una fábrica en la Rusia prerrevolucionaria.
Fue el primer largometraje de Eisenstein, que un año después dirigiría la famosa película El acorazado Potemkin.
Un trabajador es acusado del robo e, intentando lavar su imagen, se ahorca.
Un espía, con una cámara fotográfica en miniatura, capta la imagen de un hombre robando la carta.
La multitud se reúne y llama a los bomberos, los cuales la dispersan con sus mangueras.