Nuestra Señora del Refugio (Orense)

La iconografía románica más común era aquella en la que María era mostrada como «Sedes Sapientiae» o Trono de Sabiduría, concepto artístico que respondía a los modelos típicos del arte bizantino en los que la Virgen era representada como «Theotokos» o «Panaia Nikopaia», siempre vinculada de manera directa con la figura del Salvador, a quien sostiene en su regazo al tiempo que lo muestra a los fieles sin establecer ninguna clase de afectividad o cercanía maternal, resultando en consecuencia distante y fría.María es exhibida de esta forma como la mujer que hace posible el milagro de la Redención, figurando por ende con toda dignidad: sentada en un trono, en pose hierática, frontal y atemporal.[6]​ Todas estas características se encuentran presentes en la talla de Nuestra Señora del Refugio.Si a nivel cromático se halla en buenas condiciones, a nivel estructural adolece de importantes pérdidas, como los brazos, con los cuales sostendría una imagen del Niño Jesús también ausente y del que únicamente queda su huella en el regazo de la Virgen.[nota 5]​ Respecto a la imagen del infante, este aparecería muy probablemente con facciones adultas, bendiciendo con una mano y portando con la otra un libro (el libro de los Siete Sellos) o un orbe como símbolo de poder y eternidad.
Mural en recuerdo del poblado y la ermita, por Amador Diéguez Ayerbe.