Nostra Aetate

Al conocerse los horrores del Holocausto tras el final de la Segunda Guerra Mundial, algunos sacerdotes, teólogos y laicos católicos promovieron la revisión del tratamiento teológico que la Iglesia daba al judaísmo, que ya se había planteado en el periodo de entreguerras como reacción al antisemitismo nazi —entre los que destacó el teólogo francés Jacques Maritain—.

En esta toma de conciencia desempeñó un papel muy importante el judío francés Jules Isaac, cuya familia fue víctima del genocidio nazi.

[4]​ Se inició entonces un duro debate en el que el secretario Cicognani logró imponer su tesis de que se eliminara la alusión al judaísmo del documento sobre las relaciones con las religiones no cristianas (al parecer, un grupo de obispos españoles celebró su supresión con champán).

¿Cuál es, finalmente, aquel último e inefable misterio que envuelve nuestra existencia, del cual procedemos y hacia donde nos dirigimos?"

En el Budismo, según sus varias formas, se reconoce la insuficiencia radical de este mundo mudable y se enseña el camino por el que los hombres, con espíritu devoto y confiado pueden adquirir el estado de perfecta liberación o la suprema iluminación, por sus propios esfuerzos apoyados con el auxilio superior".

Esperan, además, el día del juicio, cuando Dios remunerará a todos los hombres resucitados.

Según el historiador español Gonzalo Álvarez Chillida, "modifica notablemente el tono y hay también alguna variación significativa".

Asimismo refuta la acusación de deicidio contra los judíos, base fundamental del antijudaísmo cristiano, al afirmar que la muerte de Jesús "no puede ser imputada ni indistintamente a todos los judíos que entonces vivían, ni a los judíos de hoy [... dado que] Cristo, como siempre lo ha profesado y profesa la Iglesia, abrazó voluntariamente y movido por inmensa caridad, su pasión y muerte".

Además, la Iglesia, que reprueba cualquier persecución contra los hombres, consciente del patrimonio común con los judíos, e impulsada no por razones políticas, sino por la religiosa caridad evangélica, deplora los odios, persecuciones y manifestaciones de antisemitismo de cualquier tiempo y persona contra los judíos.

El cardenal Augustin Bea , a quien Juan XXIII encargó el tratamiento del tema de la relación de la Iglesia católica con el judaísmo en el marco del Concilio Vaticano II . Se le acredita influencia decisiva en la confección del documento Nostra Aetate que incluye algunas de las reformas más significativas del concilio.