Nicolás María Rubió Tudurí

[4]​ Rubió Tudurí fue uno de los máximos representantes del novecentismo, un movimiento de renovación de la cultura que pretendía acercarla a las innovaciones producidas en el recién estrenado siglo XX, y que contrariamente a los valores nórdicos que defendía el modernismo propugnaba el retorno al mundo mediterráneo, a la cultura clásica grecolatina.

En su faceta como director de Parques y Jardines fue el principal promotor del «jardín mediterráneo», lo que se denota en obras suyas como los jardines de la plaza Francesc Macià (1925), el Parque de la Font del Racó (1926), los jardines del Palacio Real de Pedralbes (1927) y los del Turó Park (1933).

Entre 1922 y 1936 construyó la Iglesia de Santa María Reina en Pedralbes (Barcelona), una filial del Monasterio de Montserrat, donde denota una cierta influencia estilística basada en el Renacimiento italiano, principalmente en el arquitecto Filippo Brunelleschi.

Simultáneamente, en 1934 construyó el edificio de la Metro Goldwyn Mayer en Barcelona.

En 1989 fue declarado hijo predilecto de Mahón a título póstumo.