El río Navaleno pasa por el pueblo y cruza el territorio de este a oeste.
Pero también se comercializan otras especies del género Hygrophorus: llanegas; Tricholoma equestre (o seta de los caballeros), calificada desde el punto de vista culinario como “excelente”, Tricholoma terreum (o negrilla), calificada como “buen comestible”; y, aunque en menor cantidad, también se pueden encontrar Boletus edulis (miguel u hongo blanco), calificado culinariamente como “excelente”; y Boletus pinophilus (miguel u hongo rojo), también calificado como “excelente”.
Además cuenta con el Centro Micológico de Navaleno, inaugurado en 2007 y abierto desde 2008, que alberga una exposición permanente sobre el mundo de las setas y desde el que se organizan cursos relacionados con el mundo fungi.
Hasta su cierre en 1985, la villa contaba con la estación de Navaleno, perteneciente al ferrocarril Santander-Mediterráneo.
Por la tarde (sobre las 8) se prenden unas hogueras en la plaza del pueblo dónde la gente lleva sus parrillas y su comida para asarla allí con la charanga.