Es conocido como el "Niño Artillero" por su papel como integrante del Batallón Infantil, también llamado "Los Emulantes", creado por el líder insurgente José María Morelos.
El hecho que lo hizo conocido ocurrió durante el asedio a Cuautla, cuando el ejército de Félix Calleja estaba por tomar el fuerte de Santo Domingo cuando Narciso Mendoza, cargó el cañón y lo disparó, lo que sorprendió a los realistas y motivó su huida.
El combate fue feroz y caótico en ambos bandos, mientras los vecinos del pueblo arrojaban piedras desde las azoteas para defenderse.
Con tan fausto e inesperado suceso, volvió a su puesto Galeana, y quedó restablecido el orden.
Durante este mismo periodo, fue invitado por el emperador Maximiliano I a una celebración de la independencia en la capital.
En las ciudades de Cuautla y Cuernavaca existen monumentos en honor a la figura histórica de Narciso Mendoza en las que se representa el momento en que prendió fuego al cañón para hacer frente a las fuerzas realistas.