A su muerte, diez años después, continuaría las obras Manuel Muñoz Monasterio hasta su conclusión en 1931.
La decoración se realizó a base de azulejo cerámico, obras del ceramista Alfonso Romero Mesa, en el que figuran los escudos de todas las provincias españolas y otros motivos ornamentales.
Con lleno en los tendidos, participaron ocho matadores: Fortuna (hizo lo más destacado y dio una vuelta al ruedo), Marcial Lalanda, Nicanor Villalta, Fausto Barajas, Fuentes Bejarano, Vicente Barrera, Armillita Chico y Manolo Bienvenida.
En la primera actuaron Villalta, El Estudiante y Maravilla (en junio), que cortó una oreja a cada toro de su lote.
En 2015 se terminaron los trabajos de ampliación del mismo, que aumentaron y mejoraron su espacio expositivo,[8] así como su biblioteca.
Hacia 1918 la Diputación Provincial, propietaria de la antigua plaza, accede a construir un nuevo coso.
Además los terrenos, por su especial situación junto al arroyo Abroñigal, eran difíciles de desmontar.
Ante el alboroto el presidente de la plaza ordenó a la banda que no tocase en todo el festejo.
[12][13][14] Manuel Lillo compuso el pasodoble taurino 'Plaza de las Ventas' dedicado a este coso madrileño.
De igual manera a finales del 2006 y por motivos ajenos al mundo del toro se volvió a sacar el pliego de condiciones para la adjudicación de la plaza que ganó la empresa Taurodelta cuyos gerentes son José Antonio Martínez Uranga junto con su esposa e hijos.
Sin embargo, no soportó las pruebas de carga y se desmoronó sobre la plaza, sin causar víctimas.
A consecuencia del incidente, el Ayuntamiento revocó la autorización para instalar dicha cubierta.