Megarachne (del griego "araña gigante") es un género extinto de euriptéridos que vivió durante el Carbonífero Superior.
Con una longitud entre las patas estimada en 50 centímetros, se consideró a Megarachne servinei como la araña más grande que haya existido, excediendo por mucho a la tarántula Goliat (Theraphosa blondi) que tiene una anchura máxima de alrededor de 30 centímetros.
[2] El descubrimiento se hizo popular con rapidez y varias exhibiciones con reconstrucciones de Megarachne servinei como una araña gigante fueron situadas en diferentes museos alrededor del mundo.
Incluso el propio Hünicken sabía de las discrepancias en la morfología del fósil que no encajaban con su supuesta identidad arácnida.
Aun así, el holotipo estuvo por entonces depositado en una bóveda bancaria y otros paleontólogos solo tenían acceso a réplicas en material plástico.