Masacre del pozo Funeres

Así, se incrementaron las actividades del maquis y se lanzó en 1944 la invasión del Valle de Arán, que pese a su fracaso no hizo decaer la moral de las partidas que organizaban los anarquistas, el Partido Comunista de España y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

Como no fallecieran todos en el acto, al cabo de unos días los miembros del grupo ejecutor regresaron con cartuchos de dinamita y gasolina, y silenciaron los gritos agónicos prendiendo fuego sobre ellos a las sustancias que traían consigo.

[5]​ Las sucesivas investigaciones de los historiadores han tendido a reducir aquella cifra de 22 personas asesinadas, aunque se ha mantenido como la más reproducida por las obras que han tratado después la represión franquista.

Al no facilitar información, fue muerto de un disparo el 24 y precipitado a la sima.

[8]​ De esta manera, y aunque no fue la única ejecución colectiva perpetrada durante la dictadura en este periodo, sí fue la más difundida, debido a las gestiones por las que Indalecio Prieto hizo informar a las embajadas occidentales en Madrid.

Áreas de actuación del maquis.