Mala junta

El músico al comienzo no quiso usarlo pero luego lo aceptó y si bien le costó adaptarse al mismo, finalmente fue bien aprovechada para darle una especial sonoridad a la orquesta, llegándose a conocerlo como el "violín-corneta de Julio de Caro".

[6]​ Las restricciones continuaron al asumir el gobierno constitucional del general Juan Domingo Perón y en 1949 directivos de Sadaic le solicitaron al administrador de Correos y Telecomunicaciones en una entrevista que se las anularan, pero sin resultado.

Opina al respecto el escritor Oscar Conde que en definitiva, SADAIC no cuestionaba la censura en sí misma sino quién la aplicaba.

Debido a la censura, Velich modificó la letra -que aparte del título no contenía términos lunfardos- eliminando el tema de la mujer perdida para que se pudiera transmitir por radio.

convertidos en "Frente al tedio de las hondas brumas, alma/ya es en vano que yo espere dichas, calma!..."