La cultura del Argar, en esas tierras, utilizó también mármol de Macael, tal y como descubrió el mismo Siret en yacimientos datados entre el 1700 y el 1200 a. C. También hay tesis que apoyan que este mármol era utilizado como una valiosa mercancía entre las tribus argáricas.
En las proximidades del pueblo Macael el Viejo, en el mismo corazón de las canteras, existió también un asentamiento argárico.
[3] Su utilización por los fenicios no está establecida; los sarcófagos antropomorfos fenicios de Cádiz parecen provenir del Mediterráneo oriental,[4] aunque también se ha propuesto su origen local, en cuyo caso podrían haber sido tallados en mármol de Macael.
En el sureste de Hispania los romanos habían consolidado su ocupación con ciudades como Baza, Almuñécar, Guadix, Vera o Mojácar.
Durante el periodo nazarí el mármol se exportará por distintas rutas hasta Níger y Senegal.