Luisa Carolina de Hesse-Kassel (1794-1881)
[Nota 1][2] Durante una de sus visitas a su hermana en la corte virreinal establecida en la ciudad, conoció a Georg von der Decken, militar al servicio de Hannover que se había destacado en las Guerras Napoléonicas.Ernesto Augusto I, rey de Hannover reconoció a Luisa Carolina como princesa, permitiéndola el uso en la capilla del palacio real de Hannover de los bancos reservados a la familia real.Junto con su marido pasaba temporadas en su residencia familiar, el castillo de Rumpenheim.[3] Esta propiedad había sido legada a partes iguales entre los seis hijos que vivían a la muerte de su padre en 1837.A estos encuentros acudían familiares como su sobrina Luisa de Hesse-Kassel, reina consorte de Dinamarca; su hija Alejandra casada con Eduardo, príncipe de Gales (futuro Eduardo VII del Reino Unido;[5] o María de Teck que llegaría ser reina consorte del Reino Unido por el matrimonio con Jorge, hijo de los anteriores.