Luis Araquistáin

Miembro del Partido Socialista Obrero Español, perteneció al círculo de Largo Caballero y Tomás Meabe, a quien le unía una gran amistad.

Está considerado como el ideólogo de la radicalización de PSOE durante la Segunda República Española, por lo que al caballerismo (la corriente revolucionaria del PSOE y la UGT encabezada por Largo Caballero) a veces también se le designó con el término araquistainismo (así lo hizo en alguna ocasión Manuel Azaña).

[12]​ Fue nombrado para sustituir a Américo Castro, que - residiendo en Alemania - había desempeñado el cargo de forma interina.

Al estallar la Guerra Civil, adoptó postulados más radicales aún y justificó la represión que se llevaba a cabo en la retaguardia, lamentándose de que «todavía pasará algún tiempo en barrer de todo el país a los sediciosos».

Su carácter marcadamente revolucionario al inicio de la guerra se fue atemperando tras el exilio hacia la socialdemocracia, llegando a afirmar la necesidad de un gran pacto tras la guerra entre los demócratas, monárquicos y republicanos, para hacer una transición pacífica del franquismo a la democracia.

Caricaturizado por Bagaría hacia 1922