[2][3] Lucila Sarcines Reyes nació en la Calle Aromito (hoy conocida como Jirón Sechura) en el distrito del Rímac.Su madre adquiere entonces una nueva pareja la cual, lejos de cumplir un rol paterno, la maltrataba tanto física como psicológicamente.Pasado un periodo, tuvo una segunda relación de la cual no se tiene información alguna; sin embargo tampoco en ella fue feliz.[4][7] Con el grupo de Ferrando, realizó presentaciones tanto en Lima como en el interior de Perú: cantando, actuando e imitando a las extintas Celia Cruz, Olga Chorens, Toña la Negra y a Celina González.Desde ese momento, el empresario argentino Nilo Marchand, gerente de la compañía, se convirtió en su representante.Durante este periodo su salud volvió a resentirse, siendo internada por segunda vez en el Hospital Hipólito Unanue, donde se le detecta hipertensión arterial e insuficiencia cardiaca.Su segundo internamiento no pasó desapercibido puesto que se convirtió en una cantante muy reconocida y solicitada, lo que produjo constantes visitas de diferentes personas al nosocomio, tanto de conocidos como desconocidos, para verla.La entrada a su programa, hasta hoy recordada, era: Tuvo una estrecha relación amical con Consuelo Gonzáles Posada, esposa del entonces presidente de la República, el general Juan Velasco Alvarado, quien financió el primer trabajo discográfico de la artista, además de una persona infaltable a las presentaciones que ofreciera en la capital y quien también brindó auxilio médico a la artista, ante cualquier eventualidad en sus presentaciones en provincia.[10] En 1972, lanzó al mercado su tercer larga duración: Siempre criolla, con un régimen más moderado que no pudo conservar por mucho tiempo, ya que los contratos se hicieron cada vez más frecuentes.Ese mismo año fue invitada por la colonia peruana en los Estados Unidos, viajando la segunda quincena de julio, donde triunfó apoteósicamente en el Waldorf-Astoria de Nueva York y Chicago; sin embargo su médico de cabecera Eduardo Zuleta, viendo el incumplimiento del tratamiento producto de sus constantes giras, la volvió a hospitalizar debido a que los controles médicos que se realizaban mensualmente ya no hallaban mejoría sino más bien complicaciones; por lo que a inicios del año 1973 los médicos le prohibieron las actuaciones definitivamente.Sin embargo, el empeoramiento de su diabetes produjo en ella un cuadro patológico cardiaco.Algunos testigos afirmaron que aquella mañana estaba con el hábito morado, peluca plateada, en silla de ruedas y con lentes oscuros.Para los funerales, la cantante fue maquillada y peinada con su mejor peluca, como fue su deseo; así como también el ser velada en dicho centro musical.Sin embargo, al verse superado la capacidad del local, los restos fueron llevados a la Casa de la Cultura en Lince.[14][15] En 2023 se propuso relanzar su legado musical Lucha Reyes, recuerdos: Volumen uno a cargo de Jalo Núñez del Prado.m., donde hay temas que no fueron incluidos en los larga duración son el caso de "Malabrigo", "Dos cartas", "La canción del Porvenir", "Camarón", "Anhelos", "Abandonada", "Chiclayanita" , "Mi primera elegía", "Escucha mi canción", "Busco ternura", "Desesperanza", entre otros, muy aparte de estos temas en las producciones existen otros contenidos que a continuación se mencionan:
Lucha Reyes junto a representantes de la discográfica
RCA Victor
, durante la presentación de su disco
La Morena de Oro del Perú
en el Hotel Crillón de Lima, el 11 diciembre de 1970.
Lucha Reyes junto a la vedette transexual de origen francés,
Coccinelle
, durante la gira de esta última en el
Perú
a inicio de los años 1970.