Su construcción se inició en junio de 1956 por iniciativa del presidente Manuel A. Odría.
Fue erigida en la localización del fundo Ancieta Alta frente a la plazoleta del Ángel de la Resurrección, llamada así por una estatua colocada allí en el año 1877.
En el proyecto podían observarse las tres partes en las que se dividiría la necrópolis, el cual tendría una capacidad de 80 mil nichos.
Es el único crematorio ubicado en la ciudad de Lima que no pertenece a una empresa privada.
Actualmente, ante el tope de su capacidad, se están construyendo 10 000 nuevos nichos.