Los lingones puede que ayudaran a saquear Roma en el año 390 a. C. Los lingones de la Galia estaban perfectamente romanizados para el siglo I, viviendo en una sociedad rica y urbanizada en la región de Langres y Dijon y acuñando monedas, pero se vieron implicados en la Rebelión de los bátavos (año 69), descrita por Tácito.
El estratega Sexto Julio Frontino, autor del Strategematicon, el texto militar romano más antiguo que se conserva, menciona a los lingones entre sus ejemplos de tácticas militares exitosas:
Su capital recibía el nombre de Andematunnum, luego Lingones, hoy Langres en Alto Marne, Francia.
Fue construida sobre un promontorio rocoso sobre el río Marne, y aún conserva parte de sus fortificaciones medievales, que permiten vistas panorámicas al valle del Marne, la meseta de Langres y los Vosgos.
En la Britania romana, cuatro cohortes de lingones, la Cohors I Lingonum equitata, la Cohors II Lingonum equitata, la Cohors III Lingonum y la Cohors IIII Lingonum equitata, y otra más en Dacia, la Cohors V Lingonum, probablemente escogidas entre los lingones que habían permanecido en la región de Langres y Dijon, están documentadas en los siglos II y III, a partir de inscripciones dedicadas por miembros de estas unidades y por materiales de construcción sellados con sus figlinae.