Libro de Apolonio

En ellas visita varias ciudades y va estableciendo relaciones personales que le llevan a formar su propia familia.

Menéndez Pidal[2]​, uno de los medievalistas españoles más importantes, no lo sitúa en una fecha tan concreta, sino en el segundo cuarto del siglo XIII, tras un análisis lexicográfico.

Se trata de un movimiento ligado a la poesía culta en romance, principalmente durante los siglos XIII y XIV.

El “ancestro común” de esta historia se encontraría en un texto latino presumiblemente del siglo III.

Compuesta entre 1186 y 1191, tuvo una amplia influencia en toda Europa, y fue base del libro VIII de la obra Confessio amantis del inglés John Gower, quien a su vez inspiró a otros autores como el castellano Juan de Cuenca, o al propio Shakespeare.

Aun así, esta coincidencia no sirve para sacar la conclusión de que Symposio sea el autor o traductor latino.

El Libro de Apolonio está escrito en cuaderna vía, como podemos ver en el siguiente ejemplo: Muerto es Apolonio, nos a morir habemos; por cuanto nos amamos, la fin non olvidemos; cual aquí ficiéremos, allá tal recibiremos; allá iremos todos, nunca acá saldremos.

Como dice en su obra Manuel Alvar[8]​, el copista deslizó en su texto ejemplos en los que se perdían la -e y la -o finales.

El copista copiaba los casos acabados en -m como si fueran una n. A su vez, ocurre algo parecido en los pronombres le y lo, que en su gran parte acaban siendo copiados como l´, produciéndose así la apócope sobre la que nos habla Manuel Alvar en su estudio sobre la obra.

Manuel Alvar en su obra[9]​ decreta que el poema español de la época medieval se caracteriza por su mesura.

La contraposición entre grandes momentos de alegría y tristeza forja un característico detalle poético, que refleja en sí mismo la naturaleza del ser humano.

Se nos describe un personaje con una carga moral muy alta, así como un modelo de hombre muy inteligente, culto y cortesano[10]​.

Si lo comparamos con otro héroe medieval como el Cid, encontramos una brecha que separa los dos modelos de caballero.

Algo parecido ocurre en Tiro, donde a pesar de los quince años que pasa fuera, todos los ciudadanos le esperan y respetan su posición como rey.

Demuestran que, si tienes un comportamiento virtuoso y fiel a Dios, aunque pases años perdido e infeliz, serás recompensado.

Mientras que Antíoco es el ejemplo del comportamiento pecaminoso, Elányco representa los valores de la bondad y la virtud cristianas.

Como todos los personajes que actúan desde el pecado, recibe su justo castigo, siendo apedreado por petición del propio Apolonio.

Como siempre ha tenido una actitud virtuosa, en comunión con los valores cristianos, es recompensada con la ayuda de Dios en sus momentos más difíciles.

La obra se inicia con el personaje de Antíoco que, tras haberse quedado viudo, mantiene una relación incestuosa con su hija.

Para evitar perderla al contraer matrimonio con otro hombre, promete su mano a quien resuelva un acertijo indescifrable, cuya solución revela los actos impuros que mantiene con su hija.

Se reencuentra con su amigo Estrángilo y le cuenta todo lo sucedido desde que estuvo en la ciudad por última vez.

No conseguirá matarla porque, justo cuando está a punto de hacerlo, unos piratas interrumpirán la acción y la secuestrarán.

Entretanto, Apolonio regresa a Tarso y recibe la noticia de que su hija ha fallecido por un ataque al corazón.

Según anota Carroll Marden, hay hasta setenta referencias a Dios y otras quince al Creador.

Gracias a esto, al final de la obra consigue la tan deseada paz que Dios le otorga.

51 Además, cuando Apolonio cree que ha pecado y encuentra en sus posibles malas acciones el motivo de sus desgracias, decide marcharse a Egipto como penitencia.

Fue leuantando hunos tan dulçes sones, doblas y debayladas, temblantes semitones; a todos alegraua la boz los corazones; fue la duenya toquada de malos aguigones.

Se convierte en juglaresa, sirviendo como ejemplo del pueblo y haciendo referencia a la tradición lírica popular.

Al igual que hizo Luciana cuando conoce a Apolonio, Tarsiana actuará para él y demostrará su talento musical.

539 ab Según Eduardo García de Diego en su estudio, la primera edición se considera una publicada hacia el año 1475[16]​.