La Galatea se suele clasificar como un libro de pastores o una novela pastoril.
La mayoría de sus personajes son pastores, pero es un vehículo para un estudio psicológico del amor, y es este el amoroso propósito de Cervantes al escribirla.
La novela se ambienta en algún lugar –entre ideal y real– a orillas del Tajo.
En la principal, Elicio y Erastro son dos pastores enamorados de Galatea, una hermosísima pastora que reúne todas las demás virtudes de las heroínas cervantinas: discreción, inteligencia, buen juicio, honestidad y bondad.
Pero Galatea adora su independencia espiritual y no quiere verse sujeta por el yugo amoroso, así que hará sufrir de desdenes a los dos pastores.
Un ejemplo sería Francisco de Figueroa, conocido como "el Divino", por sus contemporáneos.
El pastor Tirsi, quien aparece en el Libro II de La Galatea, es Francisco de Figueroa, como lo atestiguan los tres poemas suyos que menciona el pastor Elicio.
Al final del libro, los sucesos de la novela quedan interrumpidos bruscamente:
Pero nunca se publicó la varias veces prometida segunda parte.
Posteriormente el escritor español Cándido María Trigueros publicó otra continuación titulada Los enamorados de Galatea y sus bodas.
Complete Works of Miguel de Cervantes Saavedra Volume II.