En Cantabria quedó con la idea de crear una unidad de Caballería que dificultase la progresión francesa y diera seguridad a los puertos por los que debía recibirse la ayuda inglesa.
A mediados de noviembre entraron las tropas francesas en Santander y el día 21 alcanzaron ya algunos puntos del límite con Asturias.
Durante 1813 el Regimiento de Cantabria alcanzó los cuatro escuadrones, continuó combatiendo en Cantabria y se encontró en las batallas de Vitoria (junio), Irún (julio), San Marcial (agosto), paso del Bidasoa (octubre) y San Juan de Luz (noviembre).
Terminada la guerra se retiró a su Selaya natal, apartándose de la vida pública.
La Riva consigue licencia para contraer matrimonio, caso con Mª del Rosario Malló y Bonelli en 1813.