Juan Arvizu

Hacia 1922 viajó a la capital mexicana donde ingresó al Conservatorio Nacional de Música para estudiar solfeo y armonía bajo la dirección del maestro José Pierson.

Hizo su debut en 1924 en el Teatro Esperanza Iris, en compañía de Consuelo Escobar y Ángeles Ottein.

[7]​ Juan Arvizu comenzó a cantar en el Orfeón Infantil que dirigía Antonio González, en Querétaro.

Arvizu debutó con la compañía de ópera Pierson, compartiendo escenarios con la famosa soprano española Ángeles Ottein.

[9]​ Su primera actuación se produjo en el Teatro Iris, con la opera llamada La sonámbula de Vincenzo Bellini.

Su primera obra, Varita de nardo, del maestro Joaquín Pardave, causó una grata sensación en el público.

Aquel pianista, con sus canciones arrabaleras, sensuales y sentimentales, conmovió al ya famoso Arvizu, quién, virtualmente, lo lanzó a la fama.

Aquel personaje fue Agustín Lara el autor, entre otros temas, de María Bonita y Madrid.

[16]​[17]​ Las obras de este compositor, que inmortalizó Arivizu, fueron Santa, Granada, Cuando vuelvas, Tus pupilas, Enamorada, Aventurera, Concha Nácar, entre otras.

En Cuba, Arvizu protagonizó la película más importante de su carrera: Ahora seremos felices con la escultural y carismática artista puertorriqueña Mapy Cortés.

Arvizu cantó boleros del maestro Rafael Hernández tales como «Quiero decirte», «Las palomitas», «Purísima» y «Ahora seremos felices».

Con Juan Pulido grabó «El último beso» y con Alfonso Ortiz Tirado, «Negra linda».

(Quien esto escribe, era un niño muy pequeño cuando escuchaba cantar a su padre en el hogar provinciano, aquel bello tema.

Agustín Lara (H. Peraza) Madrid 02