Residió siempre en París, aunque viajó a menudo, por lugares como Bretaña, Inglaterra, Irlanda, Holanda, Alemania y Dinamarca.
Vivió con sus padres casi toda su vida y a partir de aquella edad siempre se comunicó con ellos en euskera suletino.
Tradujo al euskera a autores clásicos en otras lenguas, tales como John Keats, Edgar Allan Poe, Hugo von Hofmannsthal, Franz Kafka o Federico García Lorca y a escritores de literaturas minoritarias, como los bretones Goulven Pennaod y Per Denez.
Junto con Txomin Peillen, en 1962 fundó la revista Igela, euskaldun heterodoxoen errebista, de la que solamente se publicaron seis números.
Sus poemas, dispersos en las numerosas revistas en que colaboró, fueron recogidos en la antología póstuma Orhoituz (Recordando), en 1976; y luego en Poemak 1950-1966 (1984).