Utilizaba los sobrenombres de Eletxun, Norbait, Ibiñaga y Idoyaga entre otros para firmar sus artículos.
Su padre, Galo Ibiñagabeitia, fue encarcelado por distribuir el libro Ami Vasco de Ramón Goikoetxea.
El primero de sus trabajos en euskera que se conoce es un poema llamado Lore ederrenak.
En las cartas que le escribía a Jon Mirande desde Guatemala y Venezuela, pone en manifiesto el gran nerviosismo existente entre los nacionalistas vascos exiliados.
En 1956 se instaló definitivamente en Caracas para tomar el rol de profesor en la Casa Vasca.