También expuso, entre otras ciudades, en Washington, París, Nueva York, Ámsterdam, Buenos Aires o Venecia.
Su estilo más personal se basa en una superación propia y seguramente inconsciente de la pintura impresionista, basado en una visión intuitiva libre del paisaje a base de manchas y masas de color que sintetizan la apariencia real, rozando a menudo la abstracción.
Los primeros estudios los inició en la escuela Sant Miquel, donde conoció a Isidre Nonell.
A los dieciséis años, estudió bajo las órdenes de Lluís Graner, quien lo inicia en el género del paisaje.
Formó en 1893 la Colla del Safrà (colla del Azafrán) con otros artistas, como Isidro Nonell, Ricard Canals, Ramón Pichot, Julio Vallmitjana y Adrià Gual.
En los últimos años del siglo se relaciona con el ambiente artístico de Els Quatre Gats.
En Mallorca descubrió una nueva naturaleza, que le amplio la gama cromática, convirtiéndolo en un pintor paisajista.
Hizo también estadas en Andorra, en el 1932, 1933, 1934, durante este último año expuso la obra de la etapa andorrana a la Sala Parés.
[4] También se dedicó al proteccionismo, sobre todo a la cerámica, colección actualmente guardada en el Museo Municipal Vicenç Ros, adquirida en 1972 por el Ayuntamiento de Martorell.
Desde entonces, su nombre se ha inscrito con fuerza en la historia del arte catalán y su obra registra una constante valoración.