[2] Acabada su formación española, en 1790 es pensionado extraordinario de Carlos IV y viaja por Francia, por toda Italia e incluso por Grecia, estudiando y midiendo monumentos y objetos de la Antigüedad clásica.
Se ignora hasta qué extremo, y en razón de dicho cargo, sea autor de la Real Casa del Labrador (ca.
Si no lo fuera de toda la estructura, sí lo sería de la fachada, con dos cuerpos laterales salientes, todo ello articulado con suma gracia, con la mejor discreción ornamental y con un rico sentido del color.
Si ello no pasó del plan -y, congruentemente se lamentaba González Velázquez de no ser requerido sino para obras menores (el puente entre Palacio y la Casa de Campo, un cuartel en El Pardo, etc.)- sí fue realidad su notable monumento a las víctimas del Dos de Mayo, en el Campo de la Lealtad, decretado en 1822 y no concluso hasta 1840.
Es un obelisco muy bien diseñado, con tres cuerpos, el inferior con urnas sepulcrales.