La inmigración estadounidense en Costa Rica se refiere al movimiento migratorio más grande e importante proveniente de Norteamérica que está presente en el país.
[3] Igualmente destacan otras migraciones aisladas de menonitas y cuáqueros que han colonizado territorio costarricense desde la segunda mitad del siglo pasado.
De esta manera muchos norteamericanos radican en el territorio costarricense durante la primera mitad del siglo XIX.
[7] Y durante este periodo se desarrollan importantes proyectos como la construcción del Ferrocarril al Atlántico que tuvieron una notable influencia norteamericana.
[8] En 1879, el gobierno de Guardia firmó un nuevo contrato con Minor Cooper Keith, quien se había asentado en Limón para iniciar el cultivo del banano.
Durante el siglo XIX la inmigración estadounidense se vio totalmente avasallada en el aspecto cuantioso por otros movimientos migratorios multitudinariamente más numerosos —como el español, el italiano y el afroantillano— sin embargo el destacado auge y acelerado desarrollo que experimentó el país durante estos años no se habría presentado sin el aporte norteamericano.
También durante este periodo comienza en la vecina Panamá la construcción del canal interocéanico por parte de los Estados Unidos, tras fallidos intentos franceses por establecer la vía náutica.
Retrocediendo hasta el 2000, vivían en Costa Rica cerca de 9.511 norteamericanos, pero diez años después esta cifra se había multiplicado en casi 7.000 personas.
Inicialmente los cuáqueros se instalaron en San José, pues estaban buscando territorios rurales donde colonizar y establecerse definitivamente.