Henrietta Boggs

En 1923, su familia se mudó a Birmingham, Alabama,[1]​ donde su padre inició un negocio de construcción.Cuatro días después, la pareja se exilió a El Salvador y buscaron refugio en México, donde participaron en reuniones clandestinas y enviaron armas de contrabando para la revolución que se estaba gestando.Figueres estableció una democracia y promulgó reformas económicas basadas en las instauradas por Roosevelrt durante la Gran Depresión.[4]​[5]​ En 1951 se divorció de Figueres y se trasladó con sus hijos primero a Birmingham y después a Nueva York, donde trabajó para la delegación de Costa Rica ante las Naciones Unidas mientras perseguía su pasión por la escritura.En 1969, Boggs regresó a Alabama donde se casó con Hugh MacGuire, un antiguo compañero del bachillerato y prominente cirujano en Montgomery con quien mantenía correspondencia desde hace años.En 1992, publicó "Casada con una leyenda: Don Pepe", libro de memorias en el que relata su vida y su participación en la política costarricense.Mientras el mundo se dividía en una Guerra Fría, Henrietta presenciaba a líderes de la izquierda, la derecha y la iglesia firmar un pacto histórico que sentaría la base del talante reformista de la Segunda República.Para ello, se “tropicalizó” un conocido modelo financiero de Broadway que permite el apoyo a las iniciativas creativas por parte de coproductores comprometidos a invertir en la economía naranja y fomentar la cultura.
Henrietta Boggs en funciones protocolarias como primera dama