En el siglo xx, Paraguay continuó recibiendo inmigrantes, sobre todo europeos que fugaban las guerras ocurridas en el Viejo Mundo, buscando mejores condiciones de vida y paz.
Varios grupos de inmigrantes se pueden encontrar entre los que se instalaron en Paraguay, como los españoles, alemanes (algunos de los cuales son menonitas), italianos, franceses, polacos, ucranianos, árabes (en su mayoría sirios y libaneses) y judíos, entre otros.
Los primeros europeos en llegar a lo que hoy es territorio paraguayo fueron los españoles y los portugueses, quienes dejaron una herencia cultural tangible, incluso, en nuestros días.
La emigración femenina no ha representado un fuerte porcentaje entre los primeros grupos de conquistadores hasta finales del siglo xviii.
Durante este período Paraguay fue moño lingüístico, es decir, se hablaba solo el idioma guaraní y otras lenguas de la región.
La emigración en el siglo XIX no se parece más a la emigración en tiempos pasados, en que los aventureros buscaban e invadían regiones, se instalaban donde encontraban abundancia de pesca, de caza, y en los mejores bosques.
Esta entrada al país de colonos extranjeros ha sido una necesidad imperativa para el desarrollo económico.
Habían partido del puerto de Burdeos en el buque Aquitaine, adquirido ex profeso por el general Francisco Solano López.
[2] Los colonos llegan a Asunción en 1856 en tres embarcaciones en diferentes etapas luego de un largo y traqueteado viaje.
En fin, un caos y mal entendidos con el gobierno paraguayo sobre todo lo que se han comprometido realizar en el acuerdo firmado.
En realidad el poco suceso de la colonia fue debido principalmente a la calidad del reclutamiento que se ha efectuado en Burdeos.
En el mismo período ingresaron un total de 2078 europeos y en ínfima cantidad los asiáticos que sumaban 73.
En todo caso, la recepción de inmigrantes en el país resulta irrelevante ante la que tuvieron Argentina, Brasil y Uruguay.
También, en este año se acució una crisis política arrastrada desde hace años, que duró cuatro meses; inmediatamente después llegaron capitales extranjeros al país para levantar la economía.
Teóricamente, la política oficial estaba encaminada a una inmigración selectiva de agricultores, pero la misma fue en definitiva ineficiente.
En el siguiente cuadro se indica el número de inmigrantes que ingresaron a Paraguay entre 1870 y 1959.