Bajo el impulso del sacerdote Eduardo Díez Estrada y en terrenos donados por Paulina Uribe a la Arquidiócesis de Medellín, en 1944 comenzó la construcción.
Como muchas otras iglesias de Antioquia, la del Perpetuo Socorro está inspirada en el gótico francés.
A su vez, las ventanas situadas en las naves laterales están decoradas con coloridos vitrales y las rematan arcos apuntalados.
[1] Como esas iglesias, la del Perpetuo Socorro tiene una planta en cruz latina, con una nave central, dos laterales, un transepto y un púlpito situado en el cruce de esos elementos.
Sobre este se encuentra una torre mucho más destacada y elevada que las otras dos.