Introdúcese la variante de la doble cruz arzobispal, colocadas en la parte superior del escudo.
[59] La UPB, fundada en 1936, es una institución privada con derecho canónico y civil, con patrimonio autónomo, sin ánimo de lucro.
Misión es un periódico mensual orientado al público en general, fue lanzado en octubre de 2011 y su formato es alrededor del estilo tabloide.
[72] El Informador es una revista mensual que abarca los temas eclesiales y de actualidad con mayor profundidad.
Adicionalmente, también son publicadas en publitas.com sitio que permite visualizar los medios impresos sin necesidad de descargarlos.
Todos ellos abjuraron de su sometimiento y volvió a reinar la unidad en el clero.
Su catedral bajó a la categoría de iglesia parroquial, y fue un duro golpe.
[88] Por tal motivo, intervino el presidente del Estado, Pedro Justo Berrío, quien logró que ambas partes se reunieran y dialogaran.
Se desprendieron las siguientes parroquias: Santa Fe de Antioquia, Anzá, Buriticá, Cañasgordas, Frontino, Abriaquí, Giraldo, Ituango, Urrao, Belmira, Ebéjico, Liborina, Sabanalarga, San Jerónimo, Sacaojal y Sucre.
[90] Se anexaron: Nueva Caramanta, Valparaíso, Támesis, Jericó, Andes, Jardín, Bolívar, Concordia, San Pedro, Donmatías, Entrerríos, Santa Rosa de Osos, San Andrés, Yarumal, Campamento, Carolina, Angostura, Anorí, Zea, Zaragoza, Cáceres, Nechí, Amalfi, Remedios, Cancán y San Bartolomé, en total 26 municipios, quedando la diócesis de Antioquia con 44 municipios.
Isaza fue un sacerdote muy preparado, con estudios en Bogotá y había sido secretario del arzobispo Arbeláez.
[85] El obispo Isaza falleció el 29 de diciembre de 1874 a los cincuenta y cuatro años, por lo cual Jiménez fue nombrado vicario capitular para que administrase la diócesis temporalmente mientras se nombraba un nuevo obispo.
Quedó como administrador apostólico de la diócesis el presbítero Rafael María González.
[101] Se tenía planeado originalmente entregar también a Sonsón y Abejorral, pero finalmente siguieron siendo de Medellín.
Caicedo fue el prelado que por más tiempo gobernó la sede episcopal de Medellín, pues estuvo hasta 1935, cuando se le nombró a su sucesor Tiberio de Jesús Salazar y Herrera, como administrador apostólico.
En 1928, cuando solamente existían en la arquidiócesis 15 comunidades religiosas masculinas, admitió la presencia de agustinos recoletos, carmelitas, franciscanos, jesuitas, claretianos y a los Hermanos Cristianos.
[85] Además, el Templo de La Candelaria, que durante 63 años mantuvo la catedralidad volvió al culto parroquial.
[107] Además, todo lo pertinente al ramo de la educación debía pasar antes por sus manos, para estudiarlo cuidadosamente y vigilar que no tuviera faltas contra la doctrina cristiana.
[108] En 1936, fundó dos instituciones educativas, la Universidad Católica Bolivariana y la Normal de Señoritas.
Administró entonces la arquidiócesis como vicario capitular, el presbítero José Joaquín Ramírez Urrea.
[109] Durante su arzobispado se implantaron por primera vez las prestaciones sociales para los sacerdotes, fijando un porcentaje de los estipendios parroquiales.
[109] Creó en 1945 la Organización Católica Social Arquidiocesana —OCSA—, que orientó todo el movimiento sindical con base en la doctrina pontificia.
Realizó la llamada «Gran Misión» en todo el arzobispado que movió a todos los fieles y sacerdotes y como resultado impuso la llamada Pastoral de Conjunto, metodología de actividades apostólicas coordinadas, que predicaba el clérigo y sociólogo francés Fernando Boulard, a quién invitó para dar conferencias al clero.
[113] Con ocasión del Concilio Vaticano II (1962-1965) fue uno de los padres conciliares que asistió a todas las sesiones y luego allanó el camino en la arquidiócesis para poner en práctica las reformas litúrgicas aprobadas en el concilio.
Caracolí, Cisneros, San Roque y Santo Domingo, en total nueve municipios.
Determinó entonces que la curia funcionara, después de haber estado diseminada por dos años en varios locales, en el tercer piso del Centro Comercial Villanueva que era el antiguo local del seminario mayor.
Carlos Prada Sanmiguel, obispo auxiliar de Medellín, fue nombrado como Administrador Diocesano.
Simplificó las estructuras eclesiásticas que existían, reduciendo el número de vicarias territoriales y sectoriales.
[130] Igualmente, durante su gobierno se creó la Casa San Alberto Hurtado y sus programas de rehabilitación.
Ordenó 318 presbíteros para la arquidiócesis de Medellín y cincuenta para distintas comunidades religiosas.