[2] Los griegos continuaron con su búsqueda, pero a diferencia de otros, estos no querían explicar la estructura interna, sino el cambio y la permanencia.
[6] Asimismo, surgieron teorías[7] que ayudaron a explicar dichos modelos como la ley de Avogadro y el movimiento browniano.
Estas teorías que tanto significan para la química se estudiaron con precisión y dejaron un legado.
Los primeros modelos que trataron de explicar cómo estaba compuesta la materia surgieron en los últimos siglos a. C. en la Antigua India, en los vaisesika y los niaiá, apareciendo en la religión yainista.
Desarrollaron detalladas teorías sobre cómo podrían combinarse los átomos, reaccionar, vibrar, moverse, y realizar otras acciones primordiales.
Con el tiempo, sus ideas fueron desechadas por algunas personas, pero en cambio en otras, fue una inspiración para continuar con la investigación.
Este planteamiento explicaba fácilmente el cambio entre una sustancia y otra por lo que fue ampliamente aceptado por los alquimistas.
Este modelo cambió con el tiempo y pretendía explicar tanto las propiedades macroscópicas como las microscópicas de la materia.
[19] Sin embargo, esta idea ―así como la existencia de los átomos y las moléculas― no fue aceptada durante mucho tiempo.
[22] En 1872, Boltzmann sentó las bases de lo que hoy se conoce como teoría cinética moderna.
[8] Einstein estudió las observaciones de un botánico inglés llamado Robert Brown,[24] quien en 1827 había descubierto el fenómeno del movimiento browniano al observar que un grano de polen en suspensión en un líquido presentaba un continuo movimiento al azar.
La historia del modelo atómico se puede dividir en tres etapas en que se propuso la existencia para comprender la composición de la materia: la primitiva; en la que surgieron las primeras ideas con el fin de dar una explicación crédula sobre cómo la materia estaba compuesta en su interior, la clásica; en la que se retomaron las primeras ideas surgidas años antes durante un período conocido como el Renacimiento donde científicos y expertos comenzaron debates e investigaciones por crear un modelo tanto creíble como verdadero, y la moderna; donde las ideas al fin se unificaron y dieron lugar al modelo aceptado hasta el día de hoy.
Para algunos filósofos, entre ellos Aristóteles y Platón, pensar en la existencia del vacío iba en contra de su propia lógica.
Las mismas ideas compartía su contemporáneo Isaac Newton, quien dedicó gran parte de su vida a la alquimia.
No está claro hasta qué punto su teoría atómica podría haber sido inspirada por las ideas anteriores.
Dalton se dio cuenta de que los elementos siempre se combinan en las mismas proporciones para formar un mismo compuesto y concluyó que las cantidades de dichos elementos pueden reducirse a números enteros sencillos.