Guerra colombo-ecuatoriana

Cuando el general Vicente Fierro, jefe del Resguardo Rumichaca, intentaba impedir la invasión, fue atacado por el comandante colombiano Matías Rosero, a lo que García Moreno respondió con un ejército de 1 200 hombres, mientras que Arboleda movilizó 900 soldados, encabezada su Primera Columna por el coronel José Antonio Eraso y la Segunda Columna por el alcalde de Pasto, coronel José Francisco Zarama.

La fuerza de los ecuatorianos descansaba en su caballería, pero no fue hasta diciembre que el ejército se arriesgó en la batalla.

En esos momentos Mosquera se hallaba en la planicie de Chupadero y Maldonado aconsejó a Flores atacar al enemigo en retirada con la caballería, lo que fue rechazado por este último.

[5]​ El ejército colombiano tras su derrota entonces optó por moverse continuamente, evitando así presentar batalla hasta haberse reagrupado completamente, y entrando finalmente en territorio enemigo.

El presidente colombiano accedió a ello, y para negociarla encargó al general Antonio Gonzales Carazo; el 21 de diciembre se firmó en Ibarra el armisticio.

Tomas Cipriano de Mosquera presidente de Colombia y comandante del ejército durante la guerra.