Grecia tiene frontera por tierra con Albania, Macedonia del Norte, Bulgaria y Turquía.
Su mayor altura se encuentra en la cadena del Olimpo, en el monte Mytikas (2919 m s. n. m.).
Se trata del quinto de Europa en prominencia (altura real de la base a la cumbre) y es superado solo por el Mont Blanc, el pico Mulhacén, el Aneto y el monte Etna.
Muchas de las islas griegas más pequeñas forman grupos o cadenas, a menudo llamadas archipiélagos, siendo ejemplos notables las Cícladas y las Espóradas en el sur y centro del mar Egeo, respectivamente.
Las seis islas del norte se encuentran frente a la costa occidental de Grecia, en el mar Jónico.
La otra isla, Citera, se encuentra frente al extremo sur del Peloponeso.
La isla se estrecha en la región cercana a Ierápetra, donde tiene sólo 12 km de ancho.
Creta se caracteriza por una cadena montañosa que se cruza de oeste a este, formada por tres subcordilleras diferentes: Estos abarcan mesetas fértiles, como Lasithi, Omalos y Nidha; cuevas como la caverna del Dicte; y desfiladeros como la Samariá.
La extensa llanura septentrional del país está recorrida por los ríos Axio y Estrimón.
Al Egeo van a dar los ríos: Axio, Estrimón, Haliacmón, Peneo y Cefiso.
De ahí que los inviernos sean muy suaves y la temperatura del mar pueda llegar a los 15 °C.
Los porcentajes representan ciudadanía, puesto que Grecia no recoge datos sobre las etnias.
Las principales ciudades son Atenas, sede del gobierno, Salónica, Patrás y El Pireo.
[4] Existe una región aparte, el Monte Athos, que posee una autonomía propia bajo soberanía griega.
Grecia cuenta con una proporción favorable de recursos naturales, e incluye carbón, petróleo, mármol, zinc, níquel, plomo, trigo, frutas y verduras, tabaco, olivos, salinas, caña de azúcar, uvas, algodón y ganado.