A medida que los comerciantes superaron la capacidad límite del área comercial, estos se fueron instalando en plena plaza, lo cual derivó a la creación de la Feria de Chillán.
[5] No sería hasta 1997, cuando surge la primera estructura, correspondiente a su actual edificación.
[4] Ya en 2017 se construye el techo del acceso por calle Arturo Prat.
[7] Asimismo, la escritora Marta Brunet, al volver de su viaje en Europa, retorna a Chillán, a la casa que tenían sus abuelos en calle Cinco de abril, lugar que hoy ocupa la tienda La Polar,[8] y que además, fue lugar donde la escritora mantuvo una amistad con Claudio Arrau.
[8] Tanto la Feria, como el Mercado de Chillán, han inspirado obras artísticas, entre las cuales se puede mencionar: