Extremely Loud and Incredibly Close (película)

Protagonizada por Sandra Bullock, Tom Hanks, Thomas Horn con Max von Sydow, Viola Davis, Jeffrey Wright, John Goodman y Zoe Caldwell interpretando personajes secundarios.

Fue candidata a dos Premios Óscar, incluyendo mejor película, siendo dicha nominación objeto de polémica.

El juego requiere la comunicación con otras personas, algo que no es fácil para Oskar.

Su padre le dice: «si las cosas fueran fáciles de encontrar, no merecería la pena buscarlas».

Thomas realiza una sexta llamada, Oskar oye el sonido del teléfono pero está demasiado asustado para contestar.

Oskar se da cuenta de que su padre ha sido asesinado y cae al suelo.

Después reemplaza el contestador automático por uno nuevo para que su madre nunca se entere.

Oskar realiza un libro de recuerdos al que titula Extremely Loud and Incredibly Close -Tan fuerte, tan cerca-.

Lo bueno del libro de Jonathan es que tiene una increíble carga emocional», señaló el director.

«Vengo del teatro, así que disfruto teniendo a mis escritores lo más cerca posible, y ambos estuvieron involucrados hasta el montaje final», declaró.

Otra área del parque que aparece en la película son las zonas rocosas cercanas a Wollman Rink.

Los primeros actores involucrados fueron Sandra Bullock y Tom Hanks, confirmándose su participación en agosto de 2010.

[12]​ John Goodman, Viola Davis y Jeffrey Wright se unieron al reparto en enero de 2011.

[13]​[14]​ James Gandolfini también formaba parte del elenco pero su participación fue eliminada del montaje final debido a que en unos pases previos al estreno la reacción de la audiencia hacia su personaje, alguien que consolaba al personaje interpretado por Sandra Bullock, fue negativa.

[7]​ Horn no hizo su debut ante las cámaras como intérprete sino como concursante en el programa de televisión Jeopardy!, donde ganó $31.000 dólares con tan sólo 12 años.

«Llegó con una gran cantidad de inteligencia y vida emocional, la cual no estaba entrenada pero era intuitiva», apuntó el director.

«Es un chico joven con una imaginación y vida únicas, fuimos muy afortunados de tenerle», sentenció Daldry.

Sin embargo la producción se retrasó y no debutó hasta diciembre y provocó que algunos académicos o grupos de votantes no pudieran visionar la película a tiempo, pese a los esfuerzos de Scott Rudin.

[7]​ La premier se llevó a cabo en Nueva York en diciembre de 2011 en el Ziegfeld Theater.

Durante su segunda semana las ventas se redujeron un 70 %, acumulando $1.7 millones de beneficio en dicho formato.

[31]​ Roger Ebert crítico del Chicago Sun Times escribió que «ninguna película ha sido capaz de proporcionar una catarsis al Holocausto, y sospecho que ninguna será capaz de proporcionársela al 9/11».

[32]​ Claudia Puig del periódico USA Today se mostró más amable con la cinta al escribir que «aunque fallida y en ocasiones demasiado histérica, la historia de Extremely Loud & Incredibly Close sobre los efectos del 11S en un niño sensible merece la pena, particularmente por su interpretación principal».

(...) Tratar el 11-S como una apoteosis del sentimentalismo y de la abyección, como hace Stephen Daldry en Extremely Loud and Incredibly Close es jugar sucio».

[34]​ Manuel Piñón de la revista Cinemanía dijo que era una «firme candidata al Óscar: a película más irritante del año (...)».

La prensa cinematográfica y la audiencia criticaron la candidatura, algunos la calificaron como «la peor candidata a mejor película de toda la historia».

[48]​ Chris Krapek del periódico Huffington Post escribió que «no sólo es la nominada a mejor película peor valorada por la crítica en los últimos diez años, sino que es fácilmente el peor film de 2011».

[53]​ No recibió ninguno de los galardones a los que optaba, el Óscar a la mejor película fue para The Artist y el ganador del Óscar al mejor actor de reparto fue Christopher Plummer por Beginners.

Algunas escenas fueron rodadas junto al Bow Bridge, uno de los puentes de Central Park.