Vasconización tardía

La vasconización tardía es un conjunto de hipótesis en las que se expone que los vascones ocuparon la actual comunidad autónoma del País Vasco y otras áreas cercanas en la antigüedad tardía o al principio de la Edad Media.Según Luis Valdés, hasta los años 80, la historiografía local trataba de compaginar la fuerte presencia indoeuropea en Vizcaya y Guipúzcoa durante la Edad del Hierro con la preexistencia de vascos preindoeuropeos suponiendo una coexistencia de ambas poblaciones: una autóctona, más antigua, que viviría refugiada en cuevas manteniendo su lengua (el vascuence o euskera) y tradiciones; y otra alóctona, formada por invasores o colonizadores indoeuropeos-celtas que ocuparon toda la región construyendo numerosos castros fortificados solo para defenderse en caso de peligro y no como poblaciones estables.Sin embargo, Valdés concluye que, hoy en día, dados los vestigios arqueológicos encontrados, no se puede sostener dicha dualidad.Para el arqueólogo Xavier Peñalver, el valle del río Leizarán fue, en la Edad del Hierro, una frontera entre dos culturas diferentes, una vascona hacia el este, que se manifiesta por la abundancia de cromlechs, y otra várdula hacia el oeste, donde predominan los castros y hay ausencia de cromlechs.[5]​ La también arqueóloga Mercedes Urteaga opina que esa frontera separaba a los pueblos vascones de los célticos, cantábricos o celtibéricos.Los actuales dialectos mencionados son muy cercanos lingüísticamente, no habiendo ninguna dificultad de comunicación entre sus hablantes.Este mismo autor ha sido muy crítico hacia las posturas contrarias a la vasconización actualmente imperantes en vascología:El significado vascólogo Koldo Mitxelena tuvo una postura contraria a la vasconización basándose en lo siguiente:[16]​ Puntos que quedan resumidos por el propio autor: Mitxelena refirió frecuentemente en sus estudios al "violentamiento" del texto de Gregorio Tours y al desconocimiento, por los sustentadores de la vasconización de Aquitania, del antiguo sustrato éuscaro, muy anterior a tal invasión, de la región aquitana: No obstante, Koldo Mitxelena publicó en 1981 un artículo, “Lengua común y dialectos vascos”, donde defendía la tesis de que los dialectos no podían ser muy antiguos, dejando una puerta abierta para las hipótesis favorables a la vasconización tardía, y presentó dos razones para ello: Por ejemplo, las abundantes palabras provenientes del latín han seguido una evolución similar en todos los dialectos.Basándose en esas razones, Mitxelena consideró que la fragmentación dialectal se produjo probablemente después del siglo VI.Estos cuatro historiadores son contrarios también a estas hipótesis, tanto por la etimología no corroborada como por la inexistencia de pruebas arqueológicas que atestiguaran tales invasiones.