Empatía

La empatía no implica en sí misma motivación de ser una ayuda; sin embargo, puede volverse una base para la solidaridad o angustia personal, lo que podría resultar en una reacción.

En psicoterapia, la empatía se puede dar por parte del terapeuta, siendo un camino para comprender tanto al paciente, como sus afectos, sus motivaciones, o sus comportamientos y resultados.

Esto tiene relación con las diversas creencias, hipótesis, teorías o especulaciones en torno al tema, algunas de las cuales se citan a continuación.

[3]​También ha sido descrita como la habilidad inconsciente para responder a las emociones o necesidades de otros.

[4]​Muchos de los autores más importantes en este tema son Decety and Jackson (2004), Shamay-Tsoory et al.

[5]​ Aristóteles afirmaba que el ser humano era un animal político (ζῷον πoλιτικόν), es decir, que es una criatura social: vive en manadas llamadas familias, clanes, grupos, aldeas, pueblos, ciudades o naciones y siente necesidad de juntarse con otros semejantes para poder realizarse como tal.

Los occidentales lo denominan urbanidad y los japoneses, un poco más ampliamente, según un término de la cortesía japonesa u omotenashi, kikubari (気配り): saber anticiparse a las necesidades o peticiones de los demás poniéndose en su lugar para que sean felices.

Aunque existen conceptos similares a la empatía como compasión o altruismo, ninguno de estos ofrecen la significación precisa de lo que se quiere expresar cuando en la actualidad se emplea el término "empatía".

Según algunos investigadores, el propio historial emocional de las personas puede afectar o distorsionar qué emociones se perciben en los demás.

Estos estudios realizados apoyan el modelo de tres factores como el más confiable.

A lo largo de la historia, se realizaron investigaciones que permitieron establecer una relación  entre la empatía y las distintas partes del cerebro.

El segundo, es propio de la activación empática y es el que lleva al sujeto a responder con una conducta apropiada.

Por esta razón se dice que la teoría de la mente es quien antecede a la empatía.

La psicopatía y la personalidad antisocial conllevan un pronóstico odioso, aunque no eterno, tanto para los pacientes como para los familiares.

Cuando los pacientes son informados sobre las implicaciones del diagnóstico, se les da a los familiares una oportunidad para tomar medidas de protección que podrán, en última instancia, hacer la diferencia entre la bancarrota o salvar las finanzas del hogar.

Este contiene descripciones, síntomas y otros criterios para el diagnóstico de trastornos mentales.

También, causa malestar clínico y deterioro en lo laboral, social u otras áreas importantes del funcionamiento.

Múltiples estudios realizados a lo largo de los años han sugerido que los seres humanos, en las palabras del neurocientífico Marco Iacoboni, están “cableados para la empatía”.

El abrazo es un símbolo común de empatía.
At the Fountain pintura de William-Adolphe Bouguereau , 1897.
Little Sulky pintura de William-Adolphe Bouguereau , 1888.
Les petites baigneuses , pintura de William-Adolphe Bouguereau, 1879.
L'Orage pintura de William-Adolphe Bouguereau, 1874.
Les deux Waldegrave pintura de Joshua Reynolds , 1762.